Por Rafael Pazarán Reyes

Internet y el Mundo

Nadie puede negar hoy la influencia del internet en la vida de las personas y en las prácticas de negocio, tanto como un instrumento que funge como fuente de datos, como habilitador del desarrollo. Esta tecnología tiene un beneficio nato en nuestras sociedades tecnificadas, la cuales precisamente cuentan entre sus ejes estructurales a la información y el conocimiento.

Por si mismo, el internet nos nutre de información que permite un mejor acceso a las ciencias, un empoderamiento de la educación, fortalecimiento del comercio global y, sobre todo, permite comunicarnos e interactuar como nunca antes lo habíamos hecho.

Sociedades de información en la era digital

Con las modernas tecnologías de la información se consolidan posibilidades casi infinitas que sacan a la superficie fuerzas que impulsan la libertad de opinión, pero sobre todo de informarse. Los ecosistemas digitales permiten un procesamiento de la información tal que las sociedades obtienen una inteligencia colectiva que deriva en individuos con derecho y poder de análisis y procesamiento de datos y así formar un criterio que en teoría debe ser más asertivo del mundo en el que vivimos.

A partir de esto podemos intuir que las sociedades actuales cuentan con elementos que promulgan una sociedad más informada y por tanto más cercana a la realidad.

Agentes de desinformación como una faceta oscura de Internet

En su libro titulado Sociedades del Riesgo, el sociólogo Ulrich Beck nos ilustra como las sociedades globalizadas están impregnadas de una serie de infortunios causados por los mismos avances tecno-científicos.

Como en cualquier universo de ciencia ficción, el nuestro también cuenta con fuerzas oscuras que desvirtúan las capacidades de la información. Diversos organismos a nivel mundial han detectado amenazas que explotan vulnerabilidades de países y de instituciones cuyo objetivo es socavar los valores democráticos y libertades como las que mencioné anteriormente. Estos agentes actúan como vectores de ciberataques y campañas de propaganda con información falsa con el objetivo puro de desestabilizar.

La inestabilidad creada es a tal grado que en algunos sectores de la sociedad se da por sentado la veracidad de cualquier noticia falsa, creando un ambiente de desinformación que podría potenciar decisiones muy alejadas del contexto en el que se vive.

Ante estos elementos, todos los actores involucrados (sociedad, gobiernos e instituciones privadas) deben crear mecanismos de respuesta a estos riesgos, esto se logra a través de indicadores y alertas tempranas que permitan una rápida acción en pro de una información sana.

Neutralidad del internet

De manera lamentable debo decir que al momento de escribir estas líneas se cierne sobre internet una normativa en los Estados Unidos de América denominada Neutralidad del internet. Esta medida tiene como fin regular el flujo de contenidos en la red global. Esto conlleva para un ciudadano común que un futuro no muy lejano que la factura casera de Internet sea tan cara como su factura de telefonía móvil con cuenta de datos, atentando con ello al internet libre.

Conclusiones

A pesar de las bondades y virtudes que la red de redes nos ofrece, podemos vislumbrar un panorama que no luce tan prometedor y esperanzador en materia de información de valor para los ciudadanos del mundo. Sin embargo, podemos darle un giro a este contexto y matizarlo no como un problema u obstáculo sino como un desafío (como los tantos que hemos superado) común que se puede enfrentar desde una visión unificada en pro de la prosperidad y desarrollo de una sociedad más fortalecida por causa de la información.