Share this post

Medio: Reporte Índigo

Especialista: Mtro. Arturo Chávez,FD

Tema: Expresidentes más caros que programas sociales

El monto destinado a las compensaciones es superior a lo asignado para algunos órganos autónomos y programas sociales

Para el presente año, el dinero contemplado para los exmandatarios en el PEF 2018 fue de mil 797 millones de pesos, el cual fue muy superior a lo asignado para algunos órganos autónomos y programas sociales.

Por ejemplo, el ramo para las pensiones de los que ocuparon la silla presidencial superó el gasto neto total para 2018 del Instituto Nacional de Transparencia y Acceso a la Información (INAI) por casi 700 millones de pesos, debido a que el Presupuesto de Egresos señala que a dicho instituto se le programaron mil 98 millones de pesos para sus funciones.

Algo similar ocurre con el gasto presupuestado para el Instituto Nacional para la Evaluación de la Educación (INEE), el cual fue de mil 227 millones de pesos; es decir, un 68 por ciento de lo programado para pensiones de los antiguos gobernantes.

El monto destinado a las compensaciones expresidenciales también fue de casi el triple de lo contemplado por concepto de gasto de la Comisión Federal de Competencia (Cofece), a la cual le fueron asignados 618.1 millones de pesos.

No sólo fueron órganos autónomos los que vieron superado su presupuesto por las compensaciones a expresidentes, también programas para el “desarrollo integral de los pueblos y comunidades indígenas” se vieron rebasados.

Al Programa Nacional de Becas se le asignó 611.4 millones de pesos, por lo que las retribuciones a los antiguos presidentes casi triplicaron dicha cantidad.

Para el Fortalecimiento a la calidad educativa se le programó 238.4 millones de pesos y al Fortalecimiento a la atención médica 285.7 millones, por esta razón, estos programas contemplados al desarrollo de comunidades indígenas, se vieron superados por lo asignado a las pensiones expresidenciales en siete y seis veces, respectivamente.

Durante el sexenio actual, por concepto de “recursos para cubrir las compensaciones de quienes han desempeñado el cargo de Titular del Ejecutivo Federal”, o bien a sus beneficiarios, se han entregado 12.1 mil millones de pesos de recursos públicos.

De acuerdo con los presupuestos de egresos, el de 2015 fue el que contempló la mayor cantidad de dinero para pensiones del sexenio. En ese periodo, se asignaron 2 mil 296 millones de pesos a este rubro. Le siguió 2014, con 2 mil 200 millones de pesos utilizados para el mismo fin.

Sin sustento legal

El apoyo a los ex presidentes de la República Mexicana se remonta a la administración de Luis Echeverría. El 25 de noviembre de 1976 se expidió el acuerdo presidencial 7637. A la letra este convenio estableció que “los ciudadanos que hayan desempeñado el cargo de presidente de la República, tendrá a su disposición y servicio mientras vivan, para el desempeño de servicios generales y a sus órdenes directas 78 elementos de las fuerzas armadas, es decir, del Ejército, de la Armada y de la Fuerza Aérea”.

Cabe señalar que ni la Constitución, ni las disposiciones legales de aquélla época preveían un apoyo de este tipo.

Con el cambio de presidentes la lista de beneficios a los funcionarios fue incrementando. Sin embargo, nunca se estableció una base legal que respaldara la manutención de los jubilados federales o a sus familias.

“Las pensiones de los expresidentes no están en ninguna legislación, como en otros países donde sí están reglamentadas”, comparte Arturo Chávez, especialista en derecho de la Universidad La Salle.

En este sentido, el también catedrático explica que el derecho de los exmandatarios para gozar de esas pensiones y beneficios son acuerdos que fueron emitidos, pero nunca se incluyeron dentro de un marco legal.

De ahí la importancia de impulsar una ley que regule los ingresos que perciben los hombres que alguna vez se desempeñaron como presidentes de México. “No se trata de quitarles el apoyo, pero, si los exjefes de Estado tienen la capacidad de seguir trabajando habría que reducírcelas a una pensión modulada”.

Millennials, ¿con pensión digna?

Los jóvenes que iniciaron su vida laboral después de 1997, se enfrentarán a una realidad muy diferente a la que vivieron sus padres o abuelos, ya que después del cambio en el esquema del ahorro para el retiro, el porcentaje de la pensión pasó de representar hasta el 80 por ciento del último salario del trabajador al 30 por ciento aproximadamente.

La manera para que esta generación de trabajadores pueda tener una pensión digna al final de su carrera profesional es con el ahorro voluntario.

“Para los jóvenes no habrá una institución que pagará sus pensiones como lo hizo con sus padres y abuelos por lo que se les tiene que advertir. La responsabilidad de ahorrar será de cada trabajador, por lo que recomendaría que si quieren gozar de una pensión digna del 80 o 90 por ciento de su último salario, se debe de aportar de forma voluntaria un monto diario pequeño de 50 pesos para ser invertido en una Afore”, revela Roberto López, experto del tema.

El especialista recomienda a los millennials cuidar este ahorro y evitar utilizarlo en gastos sorpresa o viajes.

Publicaciones Relacionadas

25 AGOSTO, 2023

Un largo camino impulsando la salud mental

Preocupada por las problemáticas de salud mental que aquejan a la adolescencia, la Universidad La...

0

2 AGOSTO, 2023

Polémica por los nuevos libros de texto

  Medio: AMX Noticias Especialista: Dra. María Eugenia Reyes / FHYCS...

0

28 JULIO, 2023

Cableras pierden un millón de usuarios por...

  Medio: expansion.mx Especialista: Dra. Claudia Benassini Félix / VI...

0

25 JULIO, 2023

Giro en migración

  Medio: Reforma Especialista: Mtro. Rafael Soler Suástegui /...

0

Deja un comentario

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.