El segundo debate presidencial abordó temas de política exterior. Los candidatos presidenciales respondieron varias preguntas acerca de aspectos como migración, relación bilateral con Estados Unidos y relaciones con otras naciones en el marco del comercio internacional.

De acuerdo con especialistas consultados por Siempre!, se trató de un ejercicio que mostró que este tema no es el fuerte de nuestros candidatos presidenciales, pues se enfocaron demasiado en Estados Unidos, en ataques personales y quedaron a deber los detalles de cómo harán realidad las pocas propuestas que presentaron.

Esta es la evaluación que hicieron de la participación de los abanderados presidenciales María Elena Pompa Dávalos, jefa de la carrera de Relaciones Internacionales de la Universidad La Salle, y de Brenda Estefan, internacionalista y exrepresentante de la Secretaría de Gobernación en la embajada de México en Estados Unidos.

Todo se enfocó en Estados Unidos: Pompa

“Considero que ninguno de los cuatro dio propuestas directas, sino que de alguna manera en el debate estuvieron atacándose entre sí, en una parte del mismo, y en la otra dijeron lo que piensan del tema migratorio y, de este, enfocándose en la relación bilateral con Estados Unidos, porque hablaron de Centroamérica, también se estaban enfocando desde el punto de vista de que México es un país de tránsito para llegar a Estados Unidos, pero tampoco enfocados a los problemas que tiene el Instituto Nacional de Migración con los centroamericanos. Todo se enfocó a Estados Unidos, es cierto que es nuestro principal socio comercial, pero de cualquier manera pudieron haber diversificado más”.

Para la responsable de la licenciatura en Relaciones Internacionales, el tiempo ocupado por los candidatos no ofreció novedades en esta materia.

“Realmente, repitieron mucho de lo que habían dicho en la campaña, creo que quedaron a deber a la ciudadanía los cómo, nunca dijeron cómo quieren implementar una u otra medida y si en verdad podría tener resultados, eso no lo dijo ninguno de los cuatro”, completó.

De acuerdo con la académica de la Universidad La Salle, el enfoque más importante para nuestro país en el ámbito de la política exterior que debió haber sido abordado es el que tiene que ver con la interconexión de varios temas en este particular.

“Todos los temas están interconectados, no es uno solo al que se debe enfocar, pero el que es de más interés para la gente es el de la inseguridad y corrupción, que son en los que deberían enfocarse. No me refiero a si deben presentar declaraciones 3 de 3, o 9 de 9, o cómo sean, o si uno tiene ingresos comprobables y otro no, sino en realidad de tratar de hablar de cómo hacer, pero de manera factible, no de buenas intenciones y por cuestiones morales, para erradicar —sé que no es algo que se pueda lograr de la noche a la mañana—, o al menos combatir para que haya un decrecimiento en este tema para que fuera ligada a la cuestión en el tema de la inseguridad, no sólo en la frontera norte o la sur, porque es algo que se presenta en todo el país, es algo que va ligado; en migración, si los mexicanos buscan emigrar al extranjero es por falta de oportunidades de empleo y buscan acomodo en el narcotráfico, de ahí la importancia de abordar esto”, explicó.

María Elena Pompa Dávalos.

Preparación de los candidatos

Para María Elena Pompa, otro aspecto que hay que revisar es la preparación de los candidatos en este tema y los asesores que les ayudan a preparar sus intervenciones en los debates.

“Este debate fue novedoso en el formato que utilizaron, conocido como Town Hall, que se retoma de la propuesta anglosajona. En Estados Unidos se utilizaba desde hace mucho tiempo este formato, en México y en muchos países de América Latina se usa esto de la asamblea popular aunque más en elecciones locales, y gracias a esto se pudieron obtener respuestas inmediatas. Ahora, no es obligación de los candidatos saber al cien por ciento todos los temas, porque es muy difícil ser todólogo, se tiene que especializar en algo; en este sentido, el que sabía mucho más de esto, por haber sido secretario de Relaciones Exteriores, fue José Antonio Meade, e introdujo temas a profundidad, pero de cualquier manera, creo que más allá de si los candidatos saben de un tema, sea política exterior o narcotráfico, lo importante es el equipo que cada uno tiene respaldándolo, porque como presidente lo que van a hacer es coordinar, darle a cada quien responsabilidades.

“Aun así, en general, todos se enfocaron a la relación con Estados Unidos, al tema migratorio, al comercio con América del Norte, pero con detalles: un candidato habló de Japón, pero debió haber sido China el mencionado, otro candidato hablo de temas multilaterales, lo cual es muy interesante, pero creo que le falto profundidad, otro dijo que ya había pensado en Alicia Bárcena, pero ella dio una entrevista en la que dijo que esto le sorprendió, nadie se había acercado a ella, y que está comprometida en la CEPAL hasta 2020, y eso da desconfianza porque da la impresión de que hablan por lo que se les ocurre en el momento en lugar de haber ido bien preparados”, completó nuestra entrevistada.

Debate muy repetitivo: Stefan

“Me da la impresión que más que propuestas específicas, son líneas de acción generales que plantearon los candidatos; no veo ideas nuevas y, en particular, en el debate me parece que no fue uno de México y el mundo, sino uno en el que el gran ausente fue el mundo, fue un intercambio de política interna con alguna traza de temas de migración y la relación con Estados Unidos, y más que con la Unión Americana de la relación con Trump, más incluso que la relación bilateral se habló de cómo manejar al actual mandatario estadounidense. Fue un debate, desde mi punto de vista, muy repetitivo, no se habló de temas clave para la política exterior mexicana como el cambio climático, la defensa de los derechos de los migrantes en los organismos internacionales, el tema de Venezuela, tampoco se tocó el tema de la imagen de México en el mundo, que tanto se ha deteriorado, y no tuvimos oportunidad de escuchar qué proponen en este particular”, explicó Brenda Estefan.

Para nuestra entrevistada, este debate se caracterizó por los faltantes en las propuestas de los candidatos.

“Tampoco supimos qué piensan hacer con Proméxico, con la marca México, si hay cambios que se propongan a la manera en que se están manejando estas cosas en el actual gobierno, tampoco vimos algo acerca del papel que debe jugar México en el mundo tendiendo su posición geoestratégica no solo en la región, sino como la puerta entre la América sajona y la latina, no vimos la idea que tienen ellos sobre los organismos internacionales”, completó.

De acuerdo con la opinión de Estefan, es preocupante la carencia de ideas de los candidatos en este ámbito.

“Pediría que nos dieran mejor sus propuestas de política exterior. He tratado de investigar en sus sitios web cuáles son sus propuestas y no hay muchas ideas frescas o cambios que se propongan; pareciera que, hasta cierto punto, se busca a nivel de campaña no hacer propuestas disruptivas o de cambios profundos. He señalado que vemos a nuestros mandatarios, como a Peña Nieto en Naciones Unidas, hablando con un tono local en distintas agendas, pero no habla con una representación del Estado mexicano, hay que recordar que a diferencia de otros países en los que tienen la figura de jefe de Estado y jefe de gobierno, en nuestro caso ambas funciones recaen en el presidente, quien tiene la tarea no solo de la gestión de gobierno sino la de representación del país, por lo que nos faltan propuestas de estadistas, de gente que entienda el mundo”, completó.

Brenda Estefan.

No somos una isla

Acerca de la preparación que mostraron los aspirantes a ocupar la silla presidencial, mostró sus dudas en relación con lo mostrado en el debate.

“Me parece que alguien que aspire a conducir el destino de nuestra nación debe tener una buena comprensión del papel de México en el mundo, y cómo nos afecta, pues no somos una isla sino parte de un complejo sistema, cuando uno se pone a ver lo que sucede en otras partes del mundo es obvio que afecta al país, por más que se quiera ver que somos únicos y que lo que sucede aquí no sucede en otros lados, por lo que sería conveniente, ejemplos de otras latitudes”, explicó.

Acerca de las propuestas específicas, Brenda Estefan se mostró decepcionada por la falta de propuestas concretas en temas como programas de ayuda a comunidades expulsoras de migrantes, por citar un ejemplo, así como otros aspectos que hubieran revelado mejor preparación.

“Si uno vio el debate previo en televisión con los representantes de política exterior, que son especialistas, fue un debate con más contenido porque en el segundo encuentro se entiende que se utilice un tono más agresivo, más contestatario, pero me parece que hubo muy pocas propuestas, las específicas no líneas de acción, el cómo, me parece que fue ausente con todos los candidatos y si bien uno de ellos afirma que la mejor política exterior es la interior, eso es muestra de cómo actuaron todos con esa lógica en el debate. Nos dejaron esperando más”, apuntó.

“Este tipo de ideas que nos pudieran dar más claridad de por dónde va la agenda estuvieron ausentes del debate”, lamentó Brenda Stefan para añadir: “algo que tampoco está presente en los documentos de los candidatos, que están llenos de líneas generales, sin ideas frescas, quizá porque no quieren hacerlas públicas sino hasta la hora del gobierno”.