Colaboración del Mtro. Carlos Clúa, Docente Facultad de Negocios acerca de la pandemia mundial.                                                                                            

La respuesta de las empresas y del gobierno ante la pandemia por el COVID-19 nos indica el nivel de administración de cada uno así como la verdadera importancia del capital humano. En la administración existe la metodología de planeación y gestión de crisis, que entre sus principales estrategias cuenta con la elaboración de un manual de planeación contingente. 

A través de este documento se define cuál será el manejo de situaciones anómalas para un negocio, analizando la probabilidad que sucedan dichas situaciones contra el impacto que tendrían. La estrategia está diseñada para definir cómo manejar a la prensa, a los empleados, autoridades, clientes, proveedores y la comunidad. 

El sector, tamaño y administración determinarán
las medidas especificas que tomará cada negocio

Los negocios de comida no se comportarán igual que los de servicios; una empresa trasnacional no hará lo mismo que el micronegocio. Por ejemplo, en Estados Unidos los restaurantes cierran en la etapa 2 de contingencia y solo ofrecen servicio de comida para llevar; los bancos dejan entrar clientes a la sucursal de 5 en 5. 

Los negocios ganadores durante la contingencia 

En este grupo recaen aquellos  que viven en el mundo digital de compras en línea y de streaming, así como empresas de entrega de comida a domicilio, productos de limpieza, farmacéuticos.

Los negocios más afectados por el COVID-19

Están comandados por la hotelería, línea áereas, taxis, fábricas, servicios de presencia física como consultorías, entre otros. Esto afecta también a los empleados eventuales, a quienes trabajan por honorarios y, por supuesto, a la economía informal .

La afectación será grande desde el punto de vista económico. El estimado del año en escenarios medio es de -1 a -2 del pib, y el aumento del desempleo. Esto dependerá de la duración de la contingencia; se estima que dure de 2 a 4 meses, catastrófico si consideramos que las pequeñas y micro empresas no aguantan más de 15 días.

En respuesta algunos gobiernos y grandes empresas ya han hecho acciones como recorrer los adeudos sin mostrarse como deudor atrasado; los gobiernos exploran entregar efectivo o no cobrar impuestos por un mes, como crédito a pagarse en meses posteriores. Las medidas de cada empresa dependerán de su situación y el ajuste que necesiten.

¿Qué pasará con los empleados?

En cuanto el pago del personal que va a casa o que continúan laborando de manera remota, dependerán de los acuerdos de la empresas. Cada empresa puede considerar dar permisos sin goce de sueldo, dar un pago normal o, si se encuentra en crisis, acordar pagos del 50%. 

No está de más recordar el articulo 427 de la ley federal del trabajo que en la fracción 7 recuerda “la suspensión de labores o trabajos, que declare la autoridad sanitaria competente en los casos de contingencia sanitaria”.

En cuanto al pago el articulo 429 facción 4 indica que “el patrón no requerirá aprobación o autorización del tribunal y estará obligado a pagar a sus trabajadores una indemnización equivalente a un día de salario mínimo general vigente, por cada día que dure la suspensión, sin que pueda exceder un mes”.

La ley misma no contempla más de un mes de contingencia. Es decir, estamos ante un caso nuevo que ni la ley lo contempla totalmente.

Finalizo con una reflexión sobre el cuento del ”anillo del rey”. En síntesis, un rey le pide a un sabio un consejo de vida para buenas y malas épocas, que sea corto para ponerlo en la parte interna de un anillo. Un día el rey se lo regala a un caballero que ha ganado la guerra para su reino y le aconseja que cuando esté en problemas lo lea. Poco después pierde la batalla en otra guerra del reino, se esconde y siente que va a ser apresado.  Entonces se acuerda del anillo y al leerlo, reza la leyenda: Esto también pasará. Este cuento nos habla de la aceptación y la templanza para vivir estos momentos.