• Lasallistas de todas generaciones y licenciaturas se reunieron en el tradicional desayuno de egresados.                           

Este sábado 18 de mayo se realizó el Desayuno de Egresados de La Salle 2019, en el cual se dieron cita más de 500 asistentes. Esta ya tradicional reunión, organizada por la Coordinación de Vinculación, tiene todas las características de un encuentro familiar, pues distintas historias nos demuestran que al convertirse en Profesionales con Valor, los lazos son más estrechos que la amistad.

El punto de convergencia fue la demostración de nuestro
Indivisa Manent, lo que está unido permanece.

Cada una de las mesas contaba con su propio carisma y había cientos de historias. Estuvieron presentes las primeras generaciones de las licenciaturas fundadoras de La Salle de la década de los sesenta. Destacaron tres generaciones:

La primera generación de contadores públicos, quienes muy orgullosos presumieron ser los primeros en pisar La Salle una vez que se abrieron sus puertas en en el 62; fueron los primeros en estrenar el gis y los borradores en aquel entonces. 

La segunda generación de ingenieros civiles, quienes egresaron de la entonces Escuela de Ingeniería en 1969. Como parte de la celebración de sus 50 años develaron una placa en la Facultad, además de que dieron un recorrido por los laboratorios. 

Los egresados de Administración en 1974, quienes ocuparon más de una mesa y nunca han perdido contacto desde el último día de clases. Ellos se reúnen el primer miércoles de cada mes y aún 70 de los egresados tienen contacto. 

Algunos de los recuerdos de su época de estudiantes se centran en los cambios de la infraestructura; cómo la universidad creció hasta convertirse en La Salle que hoy todos amamos. 

Por ejemplo, algunas egresadas recordaban las filas que debían hacerse para usar el recién inaugurado baño para mujeres. O cuando los profesores llegaban al estacionamiento el cual se convirtió en lo que hoy conocemos como Plaza La Salle.

No importaba si eran egresados de hace un año o hace cuarenta, todos coinciden en que les hubiera gustado contar con las modernas instalaciones de las cuales disfrutamos los lasallistas hoy en día. Nos veremos de nuevo el próximo año, en estas instalaciones que serán siempre su casa y cuyas puertas estarán siempre abiertas.