• Más que una fecha de la UNESCO, reafirmamos nuestro compromiso con todos los estudiantes lasallistas.        

El Día Escolar de la No Violencia y la Paz, se celebra mundialmente el 30 de enero desde 1964. El origen de dicho festejo sitúa su fundamento en la conmemoración de la muerte de Mahatma Gandhi, en 1948. 

Con motivo de la conmemoración de este día, el Mtro.  Francisco Alejandro Enríquez Torres, Director de la Facultad de Humanidades y Ciencias Sociales, y la Dra. Bertha Fortoul, Investigadora de la misma Facultad, hablan acerca de la importancia de brindar espacios seguros dentro de las instituciones educativas, como lo hacemos en La Salle, y cómo se logran a partir de las relaciones interpersonales.

La importancia de la Paz y espacios seguros en las instituciones

El Mtro. Enríquez relata el camino y la importancia que culminó en el Día Escolar de la No Violencia y la Paz. Parte del reconocimiento de esta fecha de manera internacional y cómo fue incorporada al calendario de la UNESCO.

“Originalmente esta celebración se instaura en distintas instituciones educativas de España. Posteriormente se amplió a Europa y al resto del mundo. El propósito fundamental es pasar de una cultura social y escolar fundada en la división, el miedo, la imposición y la segregación, a una cultura de la no violencia, la inclusión, el respeto, la solidaridad, la tolerancia y la justicia.

“Esta iniciativa nacida formalmente en 1964 se consolidó e institucionalizó mundialmente en 1993, cuando es reconocida por la UNESCO; en 1998 la ONU proclama la década 2001-2010 como Decenio Internacional para una Cultura de la Paz”.

Y es que las medidas tomadas por los órganos internacionales son importantes porque todo parte de las relaciones interpersonales. En palabras de la Dra. Fortoul, “todos palpamos cómo la violencia y la indiferencia están presentes en muchas situaciones”.

“La convivencia trae consigo relaciones interpersonales caracterizadas por rasgos positivos; alegría, desarrollo personal, inclusión, bienestar, reconocimiento, escucha atenta, toma de la palabra. De no darse estos rasgos positivos se habla de violencia y por ende de victimarios, de víctimas y de cómplices. No hay relaciones interpersonales sin conflictos. La manera en cómo se solucionan y los nexos que se siguen construyendo después de ellos, cualifican dicha relación hacia uno de sus polos (convivencia y violencia). En las escuelas los dos polos signan dichas relaciones, con equilibrios muy marcados según las instituciones.”

Las leyes nacionales que promueven la No Violencia y La Paz

El Director de la FHyCS destaca que “el Sistema Educativo Mexicano incorpora en todos sus documentos normativos, de gestión pedagógica y administrativa el principio de la no violencia y la paz. Lo expresa en programas y contenidos específicos que promueven la convivencia pacífica, el respeto y la tolerancia entre otros”.

“En el caso de México la idea de no violencia y la paz se expresan en la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos de 1917 (con su antecedente de 1857), en el artículo 3º. Fracción I apartado C, que se refiere específicamente a que la educación de los mexicanos debe promover e impulsar la convivencia humana y los valores para lograrla son el reconocimiento de la dignidad de la persona y de  la familia, así como el interés general por la sociedad y se apoya en los ideales de fraternidad e igualdad de los derechos de todos los hombres. La modificación constitucional de la reforma educativa del 2013 reitera dichos principios y adiciona el respeto por la diversidad cultural”.

Además, la Secretaria de Educación Pública instrumenta el Programa Nacional de Convivencia Escolar (PNCE), cuyo propósito fundamental es  “Contribuir a asegurar la calidad de los aprendizajes en la educación básica y la formación integral de todos los grupos de la población mediante la implementación de estrategias que mejoren la convivencia escolar para prevenir situaciones de acoso escolar”, mediante él se instrumentan distintas estrategias y actividades en las escuelas de educación básica que buscan mejorar las condiciones de comunicación, interacción y convivencia de los niños y niñas de nuestras instituciones educativas.

El Mtro. Enríquez Torres señala que entre las estrategias más instrumentadas se encuentra “el trabajo colaborativo, el análisis y estudios de casos, el trabajo por proyectos, entre otros, que propician la relación diaria de niños y jóvenes para fomentar el respeto, la solidaridad y la ayuda mutua”.

¿Cómo cuida La Salle a los estudiantes y promueve los espacios seguros?

En 2015, la ONU lanzó los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS); metas fijas a cumplirse en 2030 en búsqueda de un mejor planeta. En La Salle adoptamos los ODS y nos convertimos en un “Changemaker Campus”. El objetivo 4, Educación de Calidad, establece las estrategias que deberán impulsar los sistemas de educación nacionales y que entre otros aspectos se orienta a lograr la paz y la convivencia humana.

La Dra. Fortoul enfatiza en la importancia de los valores lasallistas a la hora de adoptar un rol activo por el bienestar de nuestros estudiantes. “La fraternidad nos invita a apostarle por la convivencia no solamente con los miembros de nuestra comunidad universitaria, sino con los que conforman nuestra familia, nuestros amigos, los ciudadanos, los integrantes de los distintos grupos en que participamos. Solo así, desde la base, construiremos una sociedad más pacífica”.   

A su vez, el Dr. Enríquez comenta que la creación de estos espacios seguros y la implementación de las normativas “es relevante para las instituciones educativas. Pero sobre todo para la sociedad ya que permitirá transitar a condiciones reales de comunidad y preocupación por los otros. Éstas derivan en la meta superior del bien común”.

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