Sigue estos pasos para evitar el phising y el spam.
El correo electrónico es un medio de comunicación muy importante para tus actividades personales y profesionales, además seguramente utilizas tu cuenta de correo para asociar tus redes sociales, compras y en algún momento recuperar el acceso a este tipo de servicios.
Entre los riesgos más importantes que pueden afectar tu servicio de correo electrónico están el spam y el phishing.
¿Qué es el spam?
Son correos electrónicos que no solicitaste con fines de mercadotecnia, sin intención de causar daño, pero pueden llegar a saturar tu bandeja de entrada.
¿Qué es el phishing?
Esta práctica tiene como objetivo engañar al destinatario para realizar un fraude, robo o inclusive espionaje corporativo, a través de mensajes que incluyen los logotipos de empresas reconocidas como bancos y enlaces a sitios web falsos.
Algunos elementos para identificar un correo electrónico de phishing son:
- Solicitan información sensible, como tu número de tarjeta de crédito o tu contraseña.
- Contienen un sentido muy alto de urgencia.
- El mensaje intenta generar gran curiosidad en el destinatario.
- Contienen saludos genéricos, como estimado usuario. Las empresas que te conocen suelen personalizar los mensajes.
Recibir, abrir o leer un correo electrónico de phishing no representa un riesgo. pero puede serlo, si realizas alguna acción como descargar un archivo o dar clic a un enlace.
Algunas recomendaciones:
- Si recibes correos electrónicos no solicitados, inesperados y de un remitente desconocido, toma precauciones.
- No descargues, abras archivos adjuntos o des clic a enlaces a sitios de internet en mensajes no solicitados.
- Prioriza el uso académico y/o laboral para tus cuentas Institucionales, para evitar que recibas spam.
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