Esta es la perspectiva que colocó al Director del IPADE como un líder del sector de la innovación.       

En tiempos de innovación y disrupción, el mundo necesita líderes con valores. Ésta fue la reflexión del Dr. Rafael Gómez Nava, egresado lasallista y director general emérito del Instituto Panamericano de Alta Dirección de Empresa (IPADE), en su Cátedra Prima dirigida a los estudiantes de la Facultad de Ingeniería.

A lo largo de la historia, la humanidad ha atravesado distintas eras comandadas por las ciencias y las ingenierías: la del vapor, la electrificación, la llegada del internet y la digitalización, el desarrollo de inteligencia artificial, entre otras. Sin embargo, Gómez Nava destacó que actualmente nos encontramos en una época de innovación que cambia a un ritmo sin precedentes.

Si bien, para alcanzar a 50 millones de personas, la radio tardó 38 años y la televisión 13, la adopción tecnológica actual es impensable desde un punto de vista tradicional: el videojuego de realidad aumentada Pókemon Go tardó 14 días en lograr esa cantidad de usuarios. Esta capacidad nos permite agregar un mayor valor a las empresas, pero, sobre todo, a la sociedad.

El Profesional con Valor está convencido de que, a lo largo de la historia, la moralidad del ser humano ha determinado si una aplicación tecnológica es positiva o negativa para el bien común.

“Así como pasan cosas extraordinarias, pasan cosas que deterioran a la humanidad de manera radical. Eso es una decisión y elección personal basada en los valores que nos inculcan en casa y en los que les proponen en la universidad como criterio de actuación para sus vidas”.

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El ingeniero en cibernética por esta casa de estudios, propuso a los estudiantes que, cuando les toque ser líderes de los sectores en los que se desempeñen, tomen dicha responsabilidad pensando en cumplir con los objetivos, pero también en hacer mejores a las personas. Desde su perspectiva, un líder debe cumplir con las funciones de inspirar, enseñar, exigir positivamente, acompañar, retar y ser vitamina para sus colaboradores.

“No hay futuro sin juventud y la juventud es valiosa en la medida en la que permeen líderes con conocimientos,

habilidades, actitudes y cimentado en valores que permitan que cuando voltees atrás en tu vida,

estés satisfecho de la capacidad de haber tenido un impacto positivo en los demás”.

Finalmente, el especialista invitó a los lasallistas a elaborar un análisis FODA (Fortalezas, Oportunidades, Debilidades y Amenazas) personal, para que durante sus años de universidad puedan reforzar sus cualidades y mejorar en sus debilidades.