Conoce sobre diferentes perspectivas de medir y lograr la felicidad según la ciencia.
De-Construir la felicidad
Este 20 de marzo conmemoramos el día internacional de la felicidad gracias a los esfuerzos organizados por la Organización de las Naciones Unidas, pero ¿cuáles son los motivos que llevaron a esta institución a incentivar en el imaginario colectivo de nuestra humanidad un concepto aparentemente tan común como la felicidad?
El Índice de Felicidad Interna Bruta
Para poder dar respuesta a esta incertidumbre es necesario remontarse al país de Bután en las cordilleras de los Himalayas, ubicado justo entre la Republica Popular de China y la India. En este minúsculo país con fuerte influencia budista se han llevado a cabo esfuerzos políticos desde los años 70 para romper con el modelo economista que considera el desarrollo de los países a través del crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB), y darle un vuelco para enfocar la atención en un concepto nuevo: el Índice de Felicidad Interna Bruta (FIB). Esta decisión modificó de forma radical y positiva el curso de su historia como país centrando la atención en torno a la felicidad de sus pobladores para incentivar su desarrollo emocional y espiritual.
Gracias a Bután cada 20 de marzo desde hace nueve años reflexionamos sobre la relevancia que tiene la felicidad en nuestras vidas. Pero ahora, ante las circunstancias actuales de incertidumbre donde en repetidas ocasiones nos encontramos aislados del mundo externo en el que antes vivíamos sin preocupación, donde la interacción social en presencia del otro disminuye al igual que su calidad, es fundamental construir las herramientas que nos permitan experimentar felicidad y bienestar en nuestro día a día.
¿Sabías que el 50% de nuestra felicidad
proviene de nuestro carácter heredado?
En este sentido, la ciencia nos ha permitido entender nuevos lindes de nuestra constitución humana. La genética por ejemplo, explica que, como humanos, nuestra propensión a la felicidad está constituida en un 10% por el contexto sociocultural en el que nacemos, 50% se trata de nuestro carácter heredado y queda otro 40% libre, pero … ¿qué hay de este porcentaje libre?
La psicología se ha enfocado desde ya hace unos años en investigar y centrar su atención alrededor de las cuestiones que subyacen a la felicidad. De la misma manera que Bután logró cambiar la perspectiva normalizada del desarrollo poblacional, el autor norteamericano Martin Seligman en los 90 logra establecer los fundamentos de la psicología positiva, misma que busca generar una revolución en la perspectiva que se tiene al hablar de salud mental y exponer las cuestiones imprescindibles para el bienestar.
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Seligman propone la teoría del bienestar y describe cinco áreas esenciales para la construcción de la felicidad en nuestras vidas.
Emociones positivas
Se encuentran en primer término ya que está demostrado que, aumentando su cantidad, la satisfacción con la vida aumenta también; es posible hacer uso de estas emociones como herramienta para lidiar con las emociones negativas que recibamos.
El compromiso
Trata de un acuerdo con nosotros mismos en relación con nuestras fortalezas para realizar actividades que nos llenen, que podamos conectarnos a ellas y concentrarnos en el presente.
Las relaciones positivas
Se vuelven un factor de protección y de apoyo muy poderoso a lo largo de nuestras vidas. Por ello se considera importante trabajar nuestras relaciones y habilidades personales para así fortalecer nuestra red de apoyo.
El propósito y significado
Son verdaderamente valiosos en este tema. Como especie humana, nuestra tendencia es buscar pertenecer a algo mayor que nosotros, sea la religión, la ciencia o un sentido más personal es importante tenerlo en cuenta y aclararnos cuál es el sentido que le damos a nuestras vidas.
El sentido de logro
Implica establecer metas que vayan relacionadas a nuestras propias habilidades o el desarrollo de estas. Así al trabajarlo podremos tener la sensación de ser competentes y fomentaremos nuestra autonomía. Tener en cuenta estas áreas dentro de nuestra vida nos permitirá desarrollar un crecimiento y bienestar emocional real y duradero.
Es importante remarcar que con estos planteamientos no se busca llegar a uno fórmula de la felicidad, sino poner en relieve las situaciones que la ciencia de la psicología nos indica como primordiales en la construcción de eso a lo que llamamos felicidad.
Incertidumbre y cambio es lo que vivimos en estos momentos; no podemos mantenernos estáticos y fingir que esta situación pasará por si misma sin afectarnos. El mundo ha cambiado y parece fundamental que nosotros lo hagamos con él. Fluir en esta nueva normalidad es indispensable para mantenernos sanos por lo que parece importante que nos replanteemos el valor que la felicidad nos aporta a nuestras vidas diarias y reconozcamos la importancia del optimismo.
En este día sigamos el ejemplo de Bután y Seligman quienes nos enseñan a cambiar de perspectiva para enfocarnos en las cosas que en realidad importan en la vida y realicemos un ejercicio de reflexión personal.
Y tú, ¿cuál es la relación que llevas con la construcción de felicidad?
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