Has invertido muchos años, dinero y desvelos para terminar una carrera universitaria y ahora estás listo para la gran aventura:

tu primer empleo.

¿Premio o castigo? Todo depende de qué tan rápido y en qué condiciones puedas conseguir uno.

Por lo pronto, el hecho de haber concluido tus estudios representa un privilegio, porque según la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), en México solo 17% de los estudiantes mayores de 25 años terminan la universidad.

Aunque algunos graduados no encuentran empleo de inmediato debido a la saturación de algunas profesiones y a limitaciones en su formación, en especial los idiomas y el cómputo, el esfuerzo de estudiar tiene sus ventajas: un universitario gana más del doble que una persona que solo ha concluido la educación media.

Aún así, encontrar un empleo sin tener experiencia profesional es un desafío importante y hay que tomarlo con seriedad, pues es el inicio de una carrera que marcará tu destino para siempre.

En México, la tasa de desempleo es de 3.2%, una de las más bajas de la OCDE, pero eso no significa que no haya vacantes; al contrario, decenas de compañías batallan para encontrar personal capacitado en áreas técnicas, como ingeniería automotriz y aeroespacial, informática y telecomunicaciones, química y alimentos.

¿Sin experiencia?

Los expertos recomiendan pensar en buscar un trabajo antes de terminar la escuela. Muchas instituciones educativas apoyan este esfuerzo.

José Ramón Barreiro Iglesias, director de la Facultad de Negocios de la Universidad La Salle México (ULSA), dice que desde hace varios años se han implementado materias obligatorias como Creatividad y Comunicación, Emprendimiento, Autoempleo y otras porque “son actividades transversales y multidisciplinarias en las que participan estudiantes de diferentes carreras y donde pueden convivir con compañeros de medicina, contabilidad o administración”.

Aprenden a buscar empleo, como las condiciones a las que pueden estar sujetos, las prestaciones y el potencial de desarrollo.

Barreiro Iglesias apunta que esto ayuda a tomar mejores decisiones y con ello a mejorar su apuesta a futuro. No siempre tiene que ser la empresa la que elige, los jóvenes también deben escoger dónde y con quién ganar sus primeros salarios.

Señala que la ULSA promueve prácticas profesionales obligatorias en empresas con las que firma acuerdos. “Los estudiantes deben aprobar un año de prácticas en los últimos semestres, que forman parte de sus materias.

Si sus jefes o responsables emiten un reporte negativo, el estudiante reprueba la materia y no podrá graduarse hasta que la repita. Tienen que hacer su trabajo y dar resultados”.

Además, como otras instituciones de educación superior, La Salle ofrece bolsa de trabajo, incubadora de empresas, área de investigación y un taller para empresas familiares, así como contactos con plataformas de empleo (OCC, Manpower, Michael Page).

Logra un buen CV Todo lo que se haya obtenido en las escuelas, incluyendo habilidades informáticas, idiomas, sueños y esperanzas, deben caber en el reducido espacio de ¡dos cuartillas!, pues esa es la extensión deseada de un CV, u hoja de vida.

Es biografía, carta de presentación, y reflejo de la vocación y aspiraciones del solicitante.

Ignacio Garrote, director general de la empresa de reclutamiento y coaching Phoenix Search, dice que para hacer un CV convincente, el candidato debe definirse a sí mismo como persona y profesional, saber qué quiere hacer y por dónde enfocarse.

Con ese análisis es más fácil segmentar el mercado y ponerle nombre a las empresas que están en su mira. ¿Una trasnacional, un corporativo mexicano, una Pyme con potencial o intereses afines? No todos quieren ir a las compañías más conocidas, que son muy competidas o no contratan novatos.

Garrote observa que el CV debe hacerse siguiendo los esquemas tradicionales —por estudios o competencias— pero incorporando puntos relevantes que despierten interés.

No hay que enviar el mismo currículum a todas las empresas, sino agregar una idea o comentario que muestre que el graduado sabe a qué le apunta. Puedes incluir un elevator pitch, es decir, una breve propuesta en la que expliques qué puedes ofrecer y por qué sería bueno que te contrataran.

“Este es un mercado de talentos, así que hay que saber venderse como un gran potencial y usar palabras clave como tomar riesgos, agregar valor o dar resultados. Entre decenas o cientos de CV parecidos, este tiene que ser memorable”, añade el directivo de Phoenix Search.

Abre tu camino Conseguir empleo es un trabajo serio: no le va igual al joven que entra a una Pyme, donde podrá realizar varias actividades, que al reclutado por una trasnacional, donde tendrá un espacio acotado y competido con decenas de compañeros. En unas hay muchas prestaciones, en otras libertad para innovar. Por ello, Garrote aconseja “ser estratégicos. Deben saber qué buscan en la vida, para que no les pase que después de unos años no sepan por qué llegaron a donde están.”

Muchas empresas comprenden la importancia de reclutar personal sin experiencia previa, dice Fernando Eguiluz Lozano, director general de Talento y Cultura de BBVA Bancomer. Con el fin de impulsar su transformación, se ha convertido en un banco con alma de start-up, lo que le ha valido calificar entre las cinco empresas más atractivas para trabajar, de acuerdo con el estudio The Most Attractive Employers in México.

Espacio para las nuevas generaciones

“Una de las acciones más relevantes para atraer talento joven es realizar activaciones con los alumnos, dentro y fuera del campus”, explica Eguiluz Lozano. “Desde 2016, la institución bancaria ha firmado convenios con universidades como parte de su compromiso para integrar a jóvenes egresados a empleos de calidad”.

A la fecha se han sumado la Facultad de Contaduría y Administración de la UNAM, el Instituto Politécnico Nacional, las universidades Panamericana, Anáhuac, Iberoamericana, de las Américas Puebla, del Valle de México y el IPADE Business School.

A través de los programas Trainees Jr y Graduates, el banco impulsa la inmersión de egresados de alto rendimiento académico de licenciatura y maestría, respectivamente.

A lo largo de 12 meses los integrantes rotan entre las distintas direcciones de BBVA Bancomer y al finalizar, los más destacados se incorporan de manera definitiva.

Por su parte, el Programa de Becarios, dirigido a estudiantes de los últimos dos semestres de licenciatura, busca ser una primera experiencia laboral en la que puedan vivir la cultura corporativa y regresar al finalizar sus estudios.

Barreiro Iglesias, de la ULSA, concluye que

“es importante que no se sientan presionados para aceptar la primera oferta. Lo ideal es que puedan elegir una empresa que sea afín a sus principios, valores y experiencias, porque ese primer paso es el cimiento sobre el que construirán una vida plena y productiva”.

El primer empleo no tiene que ser para siempre, pero como en el amor, es el que nunca se olvida.

DESTACA EN TU PRIMER TRABAJO Estas son las cualidades que todo empleador agradece en sus colaboradores.

Ten una actitud positiva y comprometida, sé receptivo a lo que te propongan o demanden compañeros y superiores. La gente prefiere trabajar con personas empáticas y colaborativas.

La humildad y el respeto son valores necesarios, sin importar los títulos o la clase social. Los nuevos profesionales deben entender el lugar que ocupan y al que deben insertarse. Tienen que merecer su salario, y que los jefes reconozcan el valor que aportan al equipo.

La formalidad, desde llegar a tiempo hasta respetar la cultura de la organización, es clave para una buena relación. Trabajar es una oportunidad, y adaptarse es parte del precio.

Las empresas tienen que dar resultados, y a ellos contribuyen desde el empleado más modesto hasta los altos directivos.

Enfócate en aprender y haz las cosas bien, aportando ideas, pero sobre todo compromiso.