UN ROL ÚNICO

Nadie cuestiona la importancia del padre, la abuela, los tíos o los hermanos en la formación de un niño, pero tampoco queda duda de Io fundamental que resulta una madre en su desarrollo emocional, sobre todo, en sus primeros anos, afirma el psicoterapeuta Emiliano Villavicencio.

“Con ella se establece el primer vinculo, la primera relación que a Io largo de nuestra vida vamos a seguir reproduciendo”, explica el académico de la Universidad La Salle.

“También, con ella se vive Ia primera separación, el primer abandono. Está ahí cuidando y al pendiente, pero también cuando se aleja porque se va a trabajar o a sus clases y el pequeno vive una frustración”.

Esa relación es definitoria en Ia personalidad dei nino porque le ayudará a entender distintas emociones y hacerles frente. Además, otro aspecto que se perfila es el amor propio.

“En los primeros meses se construye Ia confianza en que mamá va a estar ahí cuando Io necesite, pero esta seguridad se va a interiorizar y eso va formar parte de su autoestima”, comenta el doctor en Psicologia.

Así, resulta importante darle carino para evitar conductas tímidas, agresivas o aisladas.

“Es importante que compartan tiempo de calidad; exclusivo para ellos, en el que se deben conocer y explorar”.

Sin embargo, aclara que también es importante “frustrar” en cierta medida al pequeno, para evitar los llamados “ninos tiranos”. Por ejemplo, si el infante Hora y Ia madre siempre corre a consentirlo o darle regalos, éste creerá que siempre hay alguien para cumplir sus caprichos.

“Son los que imponen su punto de vista y sus necesidades sobre los de papá y mamá; es una relación invertida”, explica.